![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjQXTZkGBXs7Y0TIwd0F7uewCgpd6SplTwkqprOUjMmMn2s44wBaawh_YEDkNIE3hUDqdSjeyxbKgpv1L8l_ReE1BMD9n03dz3_WODHNjrEFCb4BnA2k9hLcLRu4VH7FQ1F57-3jHfmsrZe/s400/hiroshima.jpg)
"Haber asistido a esta representación en un día como el de ayer, se puede considerar, sin lugar a dudas, como una ironía, un guiño del destino, máxime cuando a esa hora el público allí presente, a no ser que estuviera consultando en sus novísimos móviles - costumbre cada vez más deplorable en nuestras salas- el candente resultado electoral, desconocía sus designios como ciudadanos.
“De Hiroshima a Nagasaki” trata de sacudir -que no levantar- la alfombra política de nuestro reino a fin de airear -que no incidir- lo que ésta esconde. Dada la cantidad de textos dramáticos que se han servido de la escena para catapultar revoluciones, ideologías o demagogias, el texto que firman Cornelles y Cardeña se podría conformar con ser un ligero aperitivo, un refrigerio, un vermut. Si ese ha sido su cometido y no otro: OK."
“De Hiroshima a Nagasaki” trata de sacudir -que no levantar- la alfombra política de nuestro reino a fin de airear -que no incidir- lo que ésta esconde. Dada la cantidad de textos dramáticos que se han servido de la escena para catapultar revoluciones, ideologías o demagogias, el texto que firman Cornelles y Cardeña se podría conformar con ser un ligero aperitivo, un refrigerio, un vermut. Si ese ha sido su cometido y no otro: OK."