Extracto de mi crítica "VERANEANTES: Se tensó el arco", para http://www.masteatro.com/ sobre este obra.
http://www.masteatro.com/critica-de-veraneantes
"...Tengo predilección por aquellos personajes que dan sus últimas bocanadas en el escenario por no contar ni con su propio conflicto al que agarrarse; admiro la dramaturgia que sólo me muestra la punta del iceberg del desencanto o de un existencialismo taimado o que sólo me deja con el logos interruptus. Soy de aquéllos que aún piensan que los personajes puedan estar fabricados a nuestra imagen y semejanza, o que la escena sea espejo cóncavo y convexo de lo que nos tumba y retumba; o que esos mismos personajes disparen, se escabullan y nos velen tanta información que seamos meros voyeurs con un único billete de ida; o que el buclage que comenta Michel Vinaver, en lo que al diálogo teatral se refiere, pueda ser la única y triunfal base de esta pieza. Hoy he visto algo por el estilo en el Central hispalense.
Del Arco juega estas cartas, pero su reparto ha establecido de antemano las reglas. Tal vez la intención de la mano que mece esta cuna junto al mar prefiera quedarse tras el biombo. Sea como fuere, me arrastra más el ruido y la furia de los/las intérpretes, que la capacidad de aquella mano, pues es sabido que los puentes han de temblar para que la tensión no los quiebre..."
Del Arco juega estas cartas, pero su reparto ha establecido de antemano las reglas. Tal vez la intención de la mano que mece esta cuna junto al mar prefiera quedarse tras el biombo. Sea como fuere, me arrastra más el ruido y la furia de los/las intérpretes, que la capacidad de aquella mano, pues es sabido que los puentes han de temblar para que la tensión no los quiebre..."