10.09.2011

crítica SE ALQUILA SOFA-CAMA.Sala Cero Producciones. Sevilla.

esta crítica también se puede ver en www.masteatro.com revista de actualidad teatral.
















SE ALQUILA SOFÁ-CAMA de Juan Alberto Salvatierra.

Dirección: Julio Fraga.

Sala Cero Producciones. Actores: José María Peña y Elías Sevillano.
Sala Cero Sevilla. Del 16 de septiembre al 16 de octubre.
 SE ALQUILA OBRA…

Tal vez tenga yo que resetearme y configurarme para asimilar una actual definición de “clown”, o de “cómico” o de “humorista” porque lo que ayer vi en la Sala Cero sevillana no se adapta -pobre de mí- a ninguno de estos conceptos. Es la segunda obra que veo ya en lo que va de temporada de Juan Alberto Salvatierra y estoy en ascuas por asistir algún día -que no leer, porque ya con estas dos he cumplido parte del calvario- a la archiconocida El Rey de Algeciras con la que ganó el Romero Esteo en el 2003, ya que tanto La balada de los Espías -salvada por el reparto y el pianista- como esta del sofá-cama -hundida por “se busca culpable”- no vislumbro yo todavía ni el encanto, ni la magia ni lo divino/trascendental de su dramaturgia.

Pero volvamos a lo de ayer, al cuerpo del delito. Delito pensar que estaba yo obligado a desternillarme de risa cada segundo, o a aplaudir en unos silencios que me destartalaban pensando que así saldría más tarde de la sala (por cierto, aforo lleno… Cosas de mi tierra, cosí fan tutte…), era una chanfaina descafeinada, “malaje”, desaborida, un querer y no poder partiendo de los siguientes ingredientes: el Club de la Comedia, Aquí no hay quien viva, Epi y Blas, Teatro para escuelas de primaria, Taller de clown municipal para distritos y un topping de circo de provincias que convertían a la obra en un je ne sais quoi de pamplinadas, muchachadas nuis estiradas hasta romperse y payasadas en bucle donde no se sabía en qué lugar quedó el texto de Salvatierra y dónde permitieron la improvisación (¿?) a los hermanos menores de Faemino y Cansado.

Sorprende igual o más que en el programa de mano aparezca la nomenclatura “Dirección de arte”. ¿Qué es un director de arte hoy en día? Pero, sobre todo, ¿dónde está el “arte” de Gonzalo Narbona en su dirección? ¿También debo redefinir mi concepto de “arte”? ¿O quizás estoy ante un abanderado de las artes escénicas clownescas y no me he enterado? Señoría, no hay preguntas.

También la sintonía musical de Santi Martínez destila el mismo “arte” o más que su colega: aparte de un volumen atronador y una insistencia machacona cada diez o dos minutos es, modificando un par de acordes, idéntica a la de Aquí no hay quien viva. ¿Debo suponer que es para familiarizarme con el tipo de género que han creado con tanto “arte”? El momento Epi+Blas cubierto el dúo con un colcha a cuadros hizo las delicias a cuantos infantes había en la sala. Sus papás: pletóricos.

La cuestión es que tocando temas como las entrevistas de trabajo, la convivencia en un piso de alquiler (escenografía no-original copiada a Animalario), cuernos, concursos de televisión, olvidando ya lo manido de todo esto, y más en clave de humor o “la grasia de mi tierra“, se le podía haber sacado una punta sin igual. No dudo de la capacidad actoral de Peña y Sevillano, pero no sé qué mano mueve, no la cuna, sino ese sofá que da título a una obra de un color tan indefinido como su tapicería. Y va por su tercera temporada… Tal vez deba resetearme o entender a Salvatierra. Ojú.